Allí, donde los ojos sienten
el punzante
color de la tristeza,
sonidos ovillados
de las olas y el viento:
(gota oscura) en cataratas de luz;
la muerte: tuya y sola,
tormentos afilados por la arena
que destruido el cielo nos ahoga,
esa bruma de vida,
esa boca sin sueño hecha de amor
–molino de los besos,
ese batir de alas en los ojos
ese latido quieto y abrumante:
¡me ofrecen impotentes
tu
carne sin espacio!
Dalmiro Meneses
Mayo 2007 - Uruguay
Todo el poema habla de la muerte, elevada a categoría estética por la calidad del poeta, sin dejar de ser muerte que duele. Me impactó especialmente "tormentos afilados por la arena de un mar que nos ahoga". Pienso en la arena, que es vidrio y afila el tormento para que penetre más profundamente y duela más, y en el agua agresiva del mar, que no restaña sino mata. Es un poema hondamente doloroso, pero también altamente poético, una especie de exorcismo para aliviar el sufrimiento (como todo el arte). Un abrazo. Adriana Maggio
ResponderEliminarDirbi, mi querida poeta Argentina, tu voz penetra en mi ser. Dalmiro
ResponderEliminar